Cuando releo El hielo en las manos vienen a mí dos reflexiones “Modern poetry is prose” (but is saying plenty) algo que escribió alguna vez Lawrence Ferlinghetti, cuya (precaria) traducción sería “…la poesía moderna es prosa (pero dice mucho)” y la otra es el concepto de “Realismo tierno” categoría que invento; ¿descubrió? Gabriela Borreli en una presentación de poesía a la que asistí (por eso es importante ir a eventos de poesía y escuchar a los otros) En los poemas de Laura ambas premisas se cumplen con creces, encontramos un verso moderno que dice mucho y a su vez una ternura en la mirada que todo lo envuelve y cuida.
Una mirada que posa su vista en lo pequeño, una poesía
de lo mínimo que recorre el libro de principio a fin. No porque los poemas (en
su mayoría) sean breves sino por donde elige Laura posar la mirada. Donde
detenerse. Ese párate no suele ser material, sino que los poemas se detienen en
sensaciones, en actos, en instantes. Entonces debo corregirme, no hay en El
hielo en las manos una poesía de lo mínimo es mas bien la poesía como acto
mínimo: una caída, un nombre, un color, el insomnio, una mentira, un consejo…
Los poemas que integran El hielo en las manos no
necesitan de mucho para sumergirnos en esa sensación risueña y alucinógena que
nos invade cuando se lee algo que nos conmueve.
Hay en este, el primer libro de poemas de Laura
Quesada, una madurez y una frescura que como lector se celebra.
*
una mentira
plegada como papel
no ocupa lugar.
📗
Libro: El hielo en las manos
Poeta: Laura Quesada
Editorial: Santos locos poesía
Año de publicación: 2022